La Des-Esperanza de la Aguirre

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Si me dejara llevar por la ligereza, catalogaría a “la condesa” Esperanza Aguirre como la versión ibérica de la cizañosa Ileana Ros-Lehtinen.

Con tan solo repasar su ridícula arenga que el diario español ABC intenta disfrazar de artículo, nos damos cuenta que la líder del Partido Popular (PP) intenta emular con la más arcaica politiquería miamense.

Resulta curioso que todos los medios de derecha se hicieran eco del contenido de dos párrafos, sin embargo, me resultó imposible encontrar el texto completo, lo cual me hace dudar si esa esquela venenosa solo fue resultado de la resaca de fin de año.

Yo, que no soy analista, al principio vi gato encerrado en sus declaraciones, aunque después todo se hizo más claro: Carromero, el español detenido en Cuba e inculpado por la muerte de Osvaldo Payá, pertenece a la cantera juvenil del PP, por lo seguramente su detención en Cuba cabreara a la Aguirre.

Ahora, ningún político español ha explicado con qué objetivos un integrante del conservador PP recorría la isla caribeña, en compañía de dos individuos que la prensa extranjera tilda de disidentes, mientras omiten que también reciben dinero e instrucciones de la SINA. ¿Acaso el PP también recibe instrucciones de la Oficina de Intereses?

Me llama la atención que mientras Fernando Rasbelrg, corresponsal de la BBC en Cuba, pronostica un acercamiento entre la isla y la Unión Europea, que bien pudiera dejar sin efecto la Posición Común, herencia de aquel tipo de bigotico a lo nazi llamado Aznar, de súbito emerge este arrebato casi infantil, plagado de niñerías y carente de argumentos.

Y me pregunto: ¿Quién es esta Esperanza Aguirre? Por lo visto, abanderada del más retrógrado pensamiento derechista, quien esgrime las mismas palabras huecas y sin sentido y conocimientos, para atacar una realidad, la cubana, que ignoran y nunca han entendido. Porque lo suyo no es entender, más bien destruir.

Y reitero la pregunta: ¿Quién es esta Esperanza Aguirre? La misma que una vez electa Presidenta de la Comunidad de Madrid dejó sin efecto la gratuidad de la vacunación del Neumococo, así como otros servicios sanitarios; bajo su mandato los madrileños presenciaron la privatización de gran parte del sistema de salud, y un deterioro progresivo de las prestaciones sanitarias públicas.

La airada señora ha estado involucrada en casos de espionaje político y financiamiento ilegal a sus campañas, además de ser famosa por sus meteduras de patas en público y sus gazapos, que incluso llegó a confundir el nombre de un colegio español, Dulce Chacón, con el de una gran poetisa cubana, Dulce María Loynaz.

“Doña Esperanza”, esa que cataloga nuestro sistema como régimen dictatorial, arremetió contra los indignados del Movimiento 15-M y les llamó “pendencieros”. ¿Exige libertades para los cubanos y las niega a los suyos?

Esta señora que de Esperanza no tiene nada, asume el discurso  trasnochado de lo más rancio del sur de la Florida, esos que llevan aclamando hace ya 54 años por un final que cada enero recomienza. Allá la desesperanza de los agoreros del mal… y de alguna que otra galleguita compungida.

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